Parashá 19 "Terumá" ¡El mérito de Elevación!
“Meditando Nuestra Parashá Semanaria” by Instituto Toráh®
(Serie: Reflexiones Breves / Nivel Sod)
Lectura: Shemot (Ex.) 25:1 – 27:19
“El mérito de Elevación”
“Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda; de todo varón que la diere de su voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda” (Shemot 25:2)
Esta parashá nos habla de la construcción del Mishkan. “Terumá” se ha traducido como: ofrenda; donación, etc. Sin embargo, según los sabios, esta palabra (terumá) tiene un significado más profundo, ella tiene su origen de la raíz hebrea: “Rum” (רם) que significa “elevar”. Así que “Terumá” se podría traducir como “Elevación”.
Ha’Shem pide a su pueblo que separe y eleve una ofrenda voluntaria, de todo su corazón para la construcción del Mishkan (tabernáculo) y del Aarón Ha’Edut (Arca del Testimonio).
¿Pero caso Ha’Shem necesitará de dicho aporte económico?
Todo esto tiene respuesta cuando nos introducimos en las profundidades de la interpretación escondida.
Miremos el Reméz: “Beit Ha’Mikdash” que se traduce como “Templo Santo”; en referencia al Templo de Jerusalem, donde “moraba” la Presencia Divina. Esto nos conecta con la energía de esta parashá.
“Beit”; (בית) que también se traduce como “Casa” tiene un valor en guematría de 412, por su parte “Mikdash” (מקדש) equivale a 444; la diferencia entre estos dos valores es de 32; la palabra “Lev” (לב) que se traduce como “Corazón” tiene exactamente este último valor.
En otras palabras, lo que nos deja hoy esta enseñanza es que a través de la verdadera voluntad del corazón podemos elevar nuestra casa; hacer de nuestro cuerpo un mishkan interno y llevarlo hacia la impregnación divina de la santidad.
Recuerden que nuestro cuerpo es la verdadera morada de la Shejiná (שְׁכִינָה) de Ha’Shem. Somos el Mishkan móvil; dónde Ha’Shem quiso morar desde un principio.
Miremos:
“Y harán un santuario para mí, y moraré en medio de ellos”. (Shemot 25:8)
La palabra “Moraré” en el original hebreo es “Shajantí”; de este verbo se extrae la palabra: “Shejiná”; es decir “Presencia Divina”. La expresión “Y moraré” (ושכנתי) tiene un valor guemátrico de 786, exactamente el mismo valor para la palabra “Shulamit” (שׁוּלַמִּית); la Sulamita que hace mención el libro de “Cantar de los Cantares”; poéticamente ella es una alusión directa de la Presencia Divina (Shejiná).
Por otro lado, la guematría de la palabra “Terumá” tiene un valor de 651; equivalente a la expresión: “Edut ha’Elion” (עֵדוּת הָעֶליוֹן), que significa: “Testigo del Altísimo”; también la palabra “Pueblo de Israel” (עם ישראל) contiene intrínsecamente el mismo valor de 651.
Es decir, la verdadera elevación espiritual, hace de nosotros mismos una morada del Santo-Bendito Sea; y ello nos lleva a ser un testigo directo del Altísimo y ser al mismo tiempo, el verdadero pueblo de Israel.
El trabajo que tenemos que realizar para elevarnos, es en el nivel del Alma llamado Ruaj; donde están nuestras emociones; nuestro corazón; nuestro “Templo”; que es la parte que conocemos como “Zeir Anpín”.
Cuando la Luz que se proyecta en el Maljut; es decir en el mundo físico, y nos llega por medio de lo que llamamos bendición; y en respuesta a ello, esa luz la canalizamos a través de agradecimiento puro; entonces hacemos que esa luz regrese a las esferas más altas; y esa acción nos eleve hasta el Kéter (la Casa del Padre). En otras palabras, es llevar maljut hasta Biná; y allí prepararnos para que el Daat nos introduzca a la Casa del Padre, o al Palacio del rey. Sin el Daat no se puede entender como baja Ha’Shem a la tierra; o a nuestra mente; el Daat (cerebelo) es el puente que une al cerebro izquierdo con el derecho; este es el punto máximo de conexión a donde nosotros podemos acceder. Es conectar la mente a nuestras emociones; para mantener una fe sana y podamos penetrar en la Conciencia Alef; es decir, en la Unidad perfecta con el Padre.
La emunáh (Fe) es el atributo que conecta a Maljut con Biná (Tanto Maljut como Biná comparten la letra “Hei” del Nombre Sagrado). La emunáh se trata de un estado espiritual; y está sólo se activa cuando lo llevamos a la experiencia. Esta acción desarrollará todos los mecanismos de nuestra percepción; ampliará nuestro Cli (vasija), pues cuando persistimos en el deseo absoluto del dar, prácticamente nos estamos elevando.
No se puede glorificar al Santo Bendito Sea aquí en la tierra; sin que pongamos por obra los atributos de la misericordia; esa es la naturaleza que emana del Eterno. Si yo soy bendecido; es para que pueda bendecir a otros. De eso se trata el levantar el Mishkan aquí en la tierra; el Mishkan físico no es otra cosa que el tabernáculo en nuestro interior.
“Mishkan” se puede transmutar en la palabra “Moshijeni” que significa “arrastrar”; es decir, cuando nosotros prácticamente “arrastramos” y rescatamos a los que están perdidos, llevándolos hacia los caminos de la Toráh, entonces en esa acción estamos construyendo un verdadero Mishkan.
Traer a personas a la teshuvá (arrepentimiento); nos acredita para levantar el Mishkan; y permear la “Presencia Divina” dentro de nosotros; porque el Alma del Mishkan es la Shejiná. A eso se le llama activar el Daat.
Cada piedra que necesitamos para edificar, se encuentra en la entrega total de mi propósito; es darme a mí mismo, porque mi vasija ha sido llena; es bendecir la materia con la materia, y lo espiritual con lo espiritual. Si yo tengo bendición financiera, tengo que otorgar tzedaká (practicar el altruismo), regresar el porcentaje que le pertenece a la materia; solo así no me dejo dominar por ella; sino que yo soy quien la domino. Si yo tengo amor (practicar la filantropía); es para otorgarlo a mis semejantes (Lev. 19:18). Esas son las piedras que necesito para levantar un verdadero altar de adoración; y luego elevarme; porque la misma bondad me hace flotar. Ofrecernos de manera generosa; es eliminar todo el peso del ego que no permite elevarnos.
¡Ha’Shem no habita en templos hechos por manos de hombres; Ha’Shem habita dentro de ti!
¿Están listos para la Elevación?
¡Shabbat Umevoraj!
Por: Oscar Jiménez Gless
Dir. Instituto Toráh®
AGRADECEMOS SU DONACIÓN DE AMOR A ESTE MINISTERIO:
https://www.paypal.me/institutotorah
Para mirar este estudio completo, ingresa aquí:
Amen. Es mi primer año que estoy estudiando las parashat desde su comienzo y en el orden. Mucho he aprendido y me asombro de lo profundo que es la Palabra del Bendito Sea.. Al leer este estudio me acuerdo cuando el apóstol Pablo habla en corintios 13. Y ahora vive la fe, la esperanza y el amor, estos 3; pero el mayor de esto, es el amor. Cuando hay un corazón puro como el oro , es porque ya fue pasado y probado por el fuego; entonces seremos almas agradecidas, generosas y lleno de ese amor que es nuestro amado Ha’shem. Gracias por enseñarnos Roeh y recordarnos que es lo que el Padre quiere de nosotros.
Muchas gracias Marbel!!
Baruj hashem
Muy buena explicacion, de la parasha
Shalom
Muchas gracias Arnulfo!!