INSTITUTO BÍBLICO DE RAÍCES HEBREAS

Que importante es entender los Escritos de Rav Shaúl en su contexto original. Sus cartas; ¡algunas muy difíciles de entender para sus contemporáneos de la época ! como el mismo Apóstol Pedro (Kefa) lo expresa en su segunda epístola: «… Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, casi en todas sus epístolas… las cuales hay algunas muy difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.» 2 P. 3:15​-16 ¡Si para el mismo Pedro eran de difícil comprensión los escritos de Shaúl, imagínate a esta distancia de tiempo que nos ocupa ! (aprox. casi 2000 años) Por eso han surgido malas interpretaciones y graves errores de comprensión escritural; trayendo un divorcio entre la Palabra y su esencia contextual, torciendo así la Escritura para perdición de las generaciones. la Epístola a los Gálatas junto con la de Romanos (entre otras) son uno de los escritos de peor interpretación y comprensión, naciendo de ellas falsos dogmas y falsas doctrinas y teologías heréticas que ponen en la pluma y boca de Rav Shaúl ¡algo que nunca dijo! Sin embargo, precisamente él advirtió que si se anunciare otro evangelio diferente al que él predicó, sea este maldito (Anatema). Es de vital importancia entender el contexto Histórico, Cultural, Literario y Profético de escritos esencialmente insuflados por el Ruaj Ha’Kodesh ( Espíritu Santo), y no solo las epístolas sino la totalidad de la Escritura para ir a una mayor dimensión exegética de la Palabra en su propia esencia divina; y quitarnos los lentes de la perspectiva griega, romana y helenista, que tanto daño han causado ¡trayendo a la vida de multitudes una ceguera espiritual! Mi mayor anhelo es que esta generación vea la restauración de todas las cosas (Hch. 3:21​) , entre ellas el regreso inminente del amado Mashiaj. Mi Corazón arde por el Abba Kadosh soplando su Espíritu desde los cuatro extremos de la tierra, levantando y dando vida a los huesos secos de Efrayim. ¿Arde el tuyo; estás sintiendo su soplo? Atte. R. Oscar Jiménez Gless